Uno de los mayores retos que debe enfrentar el planeta en materia de sustentabilidad, además del cambio climático, es una efectiva gestión de residuos.
Porque en un futuro no muy lejano, la forma en la que actualmente se trata la generación y disposición de los residuos no será suficiente para paliar su impacto en el medio ambiente.
Según el reporte de 2012 “What a waste” del Banco Mundial, para el 2025, los 1.3 mil millones de toneladas de residuos sólidos urbanos que hoy se generan cada año alrededor del mundo aumenten el doble, a 2.2 mil millones de toneladas.
La emisión de metano que produce la descomposición de los residuos enviados a vertederos podría aumentar de 34 a 48 millones de toneladas, si no surgen soluciones innovadoras para la gestión de desechos, por lo que la reducción de la cantidad de residuos que actualmente se destina a los basureros debe formar parte de las medidas que las empresas de gestión de desechos deben adoptar en el futuro.
“La eliminación de residuos a nivel mundial representa más del 12 por ciento del metano antropogénico”, señala el reporte, lo que hace que esta práctica sea la “cuarta mayor fuente de gases de efecto invernadero distintos del dióxido de carbono”.
Marcus Gover, director del grupo Waste and Resources Action Programme (WRAP), dijo a The Guardian que dichas compañías se fusionarán en lo que él llama “industria de reprocesamiento”, en donde su función principal no es arrojar cosas, sino regresar “recursos valiosos a los fabricantes”. Para el 2025, los trituradores de desperdicios “no estarán enterrando o quemando la basura de las personas como lo hacen hoy”.
“También necesitaremos tecnología más inteligente para separar los materiales con rapidez y eficacia para el reciclaje”, apuntó Steve Lee, director ejecutivo del Chartered Institution of Wastes Management de Reino Unido.
